El amor tóxico es aquel que te asfixia, el que te envuelve en un mar de confusiones, es el carece de verdad, no te deja ser tú, no te deja expresarte, y al fin y al cabo no te quiere aunque te promete hasta la saciedad hacerlo.
Cuando alguien sufre amor tóxico, generalmente no se da cuenta que su relación se alla sumida en este caos existencial, pero siempre acaban psicológicamente destrozados. Es un espejismo que se crea cuando vives un infierno creyendo que es amor, cuando en realidad es una adicción.
Una adicción peor que una droga que ni siquiera se cura dándote cuenta de que lo padeces.
Sin embargo por ahí se empieza, conociendo que ese amor que parece ser perfecto, no es tan bonito como tu lo pintas. Simplemente tienes que mirar lo que verdaderamente es una pareja.
En una pareja perfecta, no existe la perfección. La perfección está en aceptar los defectos del otro y sin esconder los tuyos. Que la otra persona no le importe si llegas tarde o fumes. Que no te ponga barreras psicosociales o físicas. Que base la relación en la confianza plena y el respeto mutuo. Que si hay peleas, a los 5 minutos haya un beso y una cama para la reconciliación. Todo eso y mucho más es el amor, y el amor tóxico no lo incluye, o si lo incluye solo es un espejismo.
Por eso recomiendo a toda persona que esté sufriendo un mal de amores o que tenga una pareja (o ex - pareja) que sea como el perro del hortelano, que intente conocer a muchas más personas, porque más allá de lo conocido existe un mundo que es mucho más interesante del que se ha conocido hasta ahora. Simplemente no hay que temerle, y no hay que conformarse con lo que se tiene.
No hay que tenerle miedo a la soledad de estar soltero mientras encuentras a tu media naranja. Hay que echarle huevos a la vida y aumentar esa autoestima que se pierde con el machaque diario.
Creerme, yo ya la he encontrado y se de lo que hablo. Mi media naranja se llama Gsus Hans o Jesús Alamillos, como quieran ustedes llamarlos. Para mi es mi pareja, mi amante y mi amigo, y jamás me imaginaria una relación tóxica con él. Pero para encontrarlo me he tenido que topar con muchos pedruscos y no he tenido miedo a esa soledad que acompaña al ser humano. Al fin y al cabo nacemos solos y morimos solos ¿qué nos puede pasar?
Quizás os pase como a mí, que en medio de esa soledad encontreis a una persona que merezca la pena para compartir vuestra vida, vuestras locuras y que os acepte tal y como sois.
Ánimo para todas las personas que lean esto y sufran un amor tóxico, quizás algún dia tengan suerte y encuentren a alguien que les haga feliz.
Para ello deben pararse a recapacitar y ser ellos mismos. No perder su esencia, y por muy dificil que sea olvidar a esa persona y recabar en otras más beneficiosas para la salud mental.
Buenas noches y buena suerte
Canción de Hoy "Un perro como tú" de Poncho K.
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