El punto de partida (¡¡Volved!!)

Con una calor sofocante y a 38º a la sombra fuera de este habitáculo, escribo hoy sobre qué es el punto de partida de algo.
El punto de partida es comunmente conocido como aquello en donde algo tiene su comienzo. Pero quizás sea más exacto decir que puede ser, además de esta definición, el punto donde se retoma algo ya empezado y, acabado en su momento.
Podemos entender el punto de partida, como llegar y olvidar todo lo pasado y volver a empezar de nuevo, pero ya con la experiencia vivida de aquello que ocurrió. Eso sería bueno si estuvieramos preparados para el perdón, la constancia, la paciencia y evadieramos nuestros miedos. O aún manteniéndolos fuéramos capaces de sobrellevarlos y empezar de cero.
Yo siempre he pensado, (al contrario de la leyenda urbana de "segundas partes nunca fueron buenas", porque ahí está Star Wars que son 6 pelis y a cual mejor, o el Señor de los Anillos o Matrix) que las segundas oportunidades siempre son buenas (ahí atrás vemos varios ejemplos) siempre y cuando se tenga la madurez suficiente para afrontarlas con valentía.

Pero si no se tiene esa valentía, esa segunda oportunidad podría arrastrarnos hacia el lado oscuro de nuestra personalidad. Podríamos sacar nuestra parte negativa que es la que no queremos que se vea bajo ningún concepto.

Teniendo esto en cuenta, estoy totalmente convencida que todo el mundo en las relaciones sociales puede volver al punto de partida con otra persona (ya sea su amigo, su pareja, su compañero de trabajo) haya pasado lo que haya pasado, siempre y cuando se sepa actuar con madurez y bajo la experiencia adquirida.
Yo pienso que a veces merece la pena intentarlo, aunque sea al menos para no vivir siempre con la espinita de decir: ¿Que hubiera pasado si lo hubiera intentado? ¿Sería mi mundo ahora diferente? ¿Sería mejor que el que tengo ahora?
Yo os aseguro que sí.
Simplemente hay que ARRIESGAR un poco en esta vida aburrida que nos propone el mundo en general.